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¿De qué hablan cuando dicen que van a abrir las escuelas? ¿De una reapertura a clases como en el mes de marzo? ¿De un reencuentro entre todos los actores de la comunidad educativa, encuentro necesario para recobrar una vida normal? ¿Habilitar espacios seguros donde exista un clima de aprendizaje distendido y con ese intercambio mágico que otorga el trabajo áulico?

No, no es de eso lo que trata la reapertura de las escuelas. Trata de un ciberespacio en el que las brechas sociales se van a ver acentuadas, donde se va a estigmatizar a aquellos/as que menos recursos tienen. Se les otorgará un lugarcito donde podrán utilizar las computadoras de la escuela, sin acercamiento a sus pares (tema que la Ministra de Educación de CABA resalta como uno de los temas fundamentales en este plan, argumentando que los/as niños/as tendrán ese reencuentro tan esperado), donde el facilitador de la clase no podrá acercarse a los/as alumnos/as para explicarles los contenidos, donde el peligro de contagios estará latente , buscando a quién atacar y hacerlo trasmisor del virus una vez que se haya retirado del establecimiento.

Es muy fácil dictar órdenes o dar entrevistas a través del zoom, ¿por qué lo hacen de esa manera? Simple, porque se preservan del virus, bueno, nuestros/as chicos/as, sus familias y todo el personal docente y no docente de las escuelas también debemos preservarnos.

Se respira una puja de poderes, una sediciosa altanería por la cual, los encargados de proteger a la comunidad educativa, se niegan a que la escuela llegue a la casa de TODO el alumnado. Este tema se lograría con la simple acción de entregar computadoras y facilitar la conectividad de cada chico/a, lograr una equidad que como sabemos, no es lo mismo que igualdad. Estigmatizan a los más pobres, los utilizan para exponerlos a una enfermedad, los usan para las fotos de las campañas políticas, los descartan cuando no los necesitan, los usan en esta experiencia rebaño, en fin, siempre la misma historia, mandan al campo de batalla a los más desprotegidos/as.

Las escuelas nunca estuvieron cerradas, desde el mes de marzo los/as docentes estamos dando clases. Es por esto que les decimos:

• No a la vuelta a clases sin vacunas.

• No a las ciberescuelas.

• No a la estigmatización de la población.

• No a la posibilidad de cargar con la culpa de haber contagiado a otras personas por el capricho infundado de exponer a quienes tendrían que acudir a las escuelas.

• No a la exposición de tener que viajar sin una seguridad sanitaria.

• Sí a la entrega de los elementos necesarios para igualar posibilidades de aprendizaje.

• Sí a la transmisión de discursos fidedignos donde no se engañe a la sociedad con respecto a este tema.

• Sí a el acondicionamiento de los establecimientos educativos para cuando pueda volver TODA la comunidad.

!LA ESCUELA NUNCA SE CERRÓ ,

ELLA ES LA QUE ENTRA A LOS HOGARES!

                                                                                                                       COMUNIDAD DE LA ESCUELA 18 D. E 13.

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